 
        Poder, política y tensiones rumbo al 2024
Aquí tienes una versión resumida y en lenguaje sencillo del contenido:
Esta semana, en el Congreso no habrá grandes decisiones. La sesión que se adelantó será más para ver los discursos llamativos de algunos legisladores, como Lilly Téllez y Gerardo Fernández Noroña. La mayoría de los diputados y senadores ya están en campaña en Durango y Veracruz, mostrando fuerza con apoyo de sus partidos. Estas elecciones locales sirven para ver cómo va la oposición y qué tanto crece la llamada “Cuarta Transformación” (4T). Morena también está organizando campañas por todo el país para promover sus temas, como la elección de jueces, mientras la oposición trata de frenarlo. Por ahora, el trabajo legislativo no es prioridad.
El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, aprovechó la visita de Claudia Sheinbaum para mostrarle su apoyo en el tema de remesas —el dinero que mandan los migrantes desde EE. UU.—. Dijo que se unirá a protestas contra posibles impuestos a ese dinero, aunque no explicó cómo serán esas movilizaciones.
En Querétaro, el gobernador Mauricio Kuri, del PAN, fue muy claro durante un evento: dijo que recibe con gusto a la gente que llega al estado, pero con tres condiciones: respetar a la sociedad queretana, obedecer la ley y no votar por Morena. Sus declaraciones fueron fuertes, especialmente cuando Morena dice que su gobierno ha sido de los que más apoyo ha recibido de la 4T.
Después de que fracasara un intento diplomático para evitar impuestos a las remesas en EE. UU., la senadora Geovanna Bañuelos propuso que los bancos mexicanos cobren menos comisiones por enviar dinero del extranjero. Aunque la idea suena bien, no se sabe si eso resolverá el problema de fondo.
Paula María García Villegas, hija de la morenista Olga Sánchez Cordero y candidata a ministra de la Suprema Corte, quiso aceptar un premio en Puebla en plena campaña electoral. El INE le advirtió que eso podría verse como promoción política, lo cual está prohibido, y le advirtió sobre posibles sanciones.
En Morelos, durante una marcha por la paz, el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro, denunció que el narcotráfico tiene tanto poder que hasta el gobierno necesita su permiso para hacer obras, reuniones o poner cámaras de seguridad. Dijo que muchos contratos oficiales están ligados al crimen. Incluso afirmó que todos saben esto y que algunos funcionarios hasta reciben parte del dinero. Un fuerte señalamiento que nadie ha desmentido, por ahora.
Este contenido fue generado con inteligencia artificial.
 
                                    