Viajar a Japón muestra lo que falta en México en tecnología y orden. En el Aeropuerto de Haneda, la tecnología, como el reconocimiento facial, facilita el ingreso rápidamente. En Japón, sistemas como “Face Express” ayudan a manejar la gran cantidad de turistas. Los trenes en Tokio son puntuales y la gente es respetuosa. La limpieza es resultado de una cultura de respeto. En Japón, incluso los niños manejan el transporte público de forma segura. La organización y el respeto superan a la tecnología en importancia. En México, falta mucho para alcanzar este nivel de eficiencia y orden.
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