Impuesto a remesas golpea a familias y consumo en México
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso aplicar un impuesto del 3.5 % a las remesas que se envían desde su país hacia México. Esta medida afectaría principalmente a millones de familias mexicanas, ya que ese dinero se usa para cubrir necesidades básicas como comida, vivienda, ropa y educación.
Actualmente, enviar dinero a México ya tiene un costo adicional de entre 5 % y 10 % que cobran empresas como Western Union y MoneyGram. Si se aprueba este nuevo impuesto en el Senado de Estados Unidos, se acabaría la actual exención de impuestos sobre las remesas.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se mostró en contra de este cobro y dijo que incluso la reducción del impuesto de 5 % a 3.5 % no es motivo de celebración. En 2024, México recibió 62,500 millones de dólares en remesas, lo que fue un récord.
Tiendas como Walmart, Chedraui, Soriana, La Comer, y lugares donde se reciben remesas como Oxxo, Elektra (con Banco Azteca), y Waldo’s, serían también afectados. Por ejemplo, en Waldo’s, muchas personas usan el dinero enviado desde el extranjero principalmente para comprar despensa. Según datos de la empresa, al menos el 20 % de las remesas que reciben se gasta en comida.
Además, el banco BBVA señaló que este impuesto afectaría directamente a los 4 millones de mexicanos indocumentados que viven en Estados Unidos y que envían dinero a sus familias. Los estados mexicanos que más sentirían el impacto de esta medida serían Tamaulipas, Guerrero, Puebla, Oaxaca y Veracruz.
Las remesas son muy importantes para la economía de muchas familias mexicanas: cerca de la mitad de ese dinero se usa para comprar productos básicos y casi el 38 % para cubrir servicios como luz, agua o educación.
Una encuesta de Kantar World Panel indicó que alrededor del 8 % de los hogares mexicanos recibe remesas cada mes. De ese dinero, 11 % se usa para pagar escuelas, 10 % para pagar deudas y 9 % para ropa y calzado.
Este contenido fue elaborado con inteligencia artificial.