La pelea por el control del territorio en México entre el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa ahora incluye a exmilitares colombianos que son llamados para entrenar a sicarios. Un grupo de 12 colombianos fue detenido luego de un ataque con explosivos que mató a soldados mexicanos en Michoacán. El gobierno de México trabaja con Colombia para impedir ese reclutamiento.
La gente del narcotráfico busca exmilitares colombianos por su experiencia en combate. Estos exmilitares enfrentan malas condiciones en Colombia, lo que los hace aceptar trabajos como mercenarios ofrecidos con engaños. A ellos se les obliga a entrenar sicarios y cometer actos criminales.
Omar García Harfuch, funcionario de seguridad en México, ha dicho que tanto el CJNG como el Cártel de Sinaloa están involucrados en el reclutamiento de colombianos, quienes llegan a México por avión.
Un exmilitar que escapó del CJNG cuenta que, a pesar de lo que vivió, sigue buscando trabajos como mercenario ya que no conoce otra forma de trabajo. Según él, los exmilitares colombianos entrenan a jóvenes sicarios en México, y varias personas han sido enviadas de regreso a Colombia tras ser capturadas.
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