Samsung ha anunciado el Galaxy S25 FE, destacando un nuevo diseño con bordes más delgados, aunque las especificaciones no cambian mucho. Tendrá 8GB de RAM y opciones de almacenamiento de 128GB o 256GB, a partir de 650 euros.
El precio es más alto que el Galaxy S24 FE sin grandes mejoras en memoria o almacenamiento, lo que ha provocado críticas ya que otras marcas ofrecen más por el mismo precio.
El enfoque está en el diseño, no en el rendimiento
Destacan cambios en el diseño: es más delgado, con marcos reducidos y una pantalla AMOLED de 6,7 pulgadas y 120Hz, con mayor brillo para luz exterior.
La carga rápida mejora con 45W, duplicando la capacidad anterior, lo que sí será notable en el uso diario.
En fotografía, hay pocos cambios: la cámara frontal ahora tiene 12MP, y las otras mantienen los mismos sensores. Samsung se enfoca en mejorar el software en lugar de cambiar los sensores.
Usará el procesador Exynos 2400e, aunque algunos mercados podrían tener el MediaTek Dimensity 9400. Se espera un rendimiento adecuado pero sin destacarse demasiado. Los colores son Navy, Iceblue, Jetblack y White, destacando especialmente el color blanco.
Comparado con modelos pasados, Samsung prefiere la continuidad en lugar de cambios drásticos. El lanzamiento podría ser a finales de 2025, con un precio estimado de 909 euros en Europa. El Galaxy S25 FE deberá competir contra dispositivos que ofrecen más memoria y almacenamiento por precios similares.
Finalmente, depende de si los usuarios aprecian más las mejoras en diseño y carga rápida que especificaciones más altas. Samsung espera que sea así, pero el tiempo lo dirá.
El contenido fue hecho con inteligencia artificial y la fuente original es “Andro4all”.
