El primer ministro de Ontario, Doug Ford, ha considerado imponer recargos a las exportaciones de electricidad a Estados Unidos si las negociaciones comerciales con Trump no son justas. Anteriormente, Ford aplicó un impuesto del 25% a la energía exportada a Michigan, Minnesota y Nueva York en respuesta a la guerra comercial de Trump. Retiró esta medida cuando el presidente aumentó los aranceles al acero y aluminio canadienses al 50%. Trump aumentó esos aranceles y amenazó con incrementarlos a otros productos canadienses al 35% si no se logra un acuerdo. Ford, junto a otros líderes, apoya la construcción de un nuevo oleoducto en Ontario para reforzar la seguridad energética de Canadá y reducir la dependencia de la Línea 5, que pasa por Estados Unidos. También, Ford ha propuesto una alianza llamada “Fortaleza Am-Can” para fortalecer la relación con Estados Unidos en la competencia con China. Ontario es vital en la industria financiera y automotriz de Canadá, y Ford ha planteado represalias como restringir el suministro de energía y cancelar contratos con empresas estadounidenses si la guerra comercial continúa.
El contenido fue hecho con inteligencia artificial y la fuente original es “El Financiero”.
